Summary

Se ha presentado ante la SECUM información sobre la existencia de diversos obstáculos a la libertad de establecimiento en el ámbito de la prestación de servicios de transporte discrecional de viajeros por carretera, regular de uso especial, y turístico, contenidos en la normativa que regula este sector.

Las restricciones que se impongan a los servicios de transporte de viajeros en autocar han de orientarse por el principio de necesidad y proporcionalidad establecido en el artículo 5 de la Ley 20/2013, de 9 de diciembre, de garantía de la unidad de mercado (LGUM).

El principio de necesidad podría cumplirse, entendiendo que las restricciones podrían estar amparada por varias razones imperiosas de interés general como la protección de los derechos de los consumidores y de los destinatarios de servicios: su derecho a acceder a servicios de transporte eficaces y seguros.

No obstante, sería preciso analizar la proporcionalidad de cada restricción de forma individual (su vinculación con la RIGG que se pretende proteger), especialmente de determinadas obligaciones impuestas al transporte turístico (canal de comercialización, los servicios complementarios, el itinerario de ida o de vuelta y la imposición un precio mínimo en caso de que el itinerario a realizar sea coincidente con una línea regular) así como de la obligación de contratación del vehículo completo en el transporte regular de uso especial, teniendo en cuenta que ambos tipos de transporte parecen atender una demanda diferente de modo que podrían no estar compitiendo directamente con las líneas de transporte regular de uso general que supuestamente se pretenderían proteger.